Siempre vivimos dentro de un ciclo, definición que se puede apreciar en todo lo que nos rodea. Las cosas buenas y cosas malas que nos ocurren también son parte de un ciclo y no se puede esperar ser feliz sólo en buenos momentos o sólo cuando nos enfrentamos a situaciones cuyo resultados nos favorecen.
La pregunta es que decisión podemos tomar en cada situación en la que nos enfrentamos para siempre estar alineados con la felicidad y esto se puede responder clasificado las situaciones de la siguiente forma:
1.- Posición respecto de la situación:
- No se acepta que una situación suceda (No aceptación)
- Sí se acepta que una situación suceda (Aceptación)
2.- Posibilidad de cambiar la situación:
- Sí se puede cambiar (Con posibilidad de cambio)
- No se puede cambiar (Sin Posibilidad de cambio)
Si combinamos ambos ejes nos dan como resultado cuatro cuadrantes en los cuales habrá emociones diferentes dependiendo de cual cuadrante sea.
No Aceptación – Con Posibilidad de cambios:
Si logramos darnos cuentas que estamos en una situación como esta juntaremos las fuerza necesaria para iniciar y lograr el cambio necesario para salir de esa situación. Las emoción que reina en este cuadrante es la ambición positiva, emoción que genera mucha satisfacción.
No Aceptación – Sin Posibilidad de cambios:
Acá es negar algo que no se puede cambiar, lamentablemente las personas caemos mucho en este cuadrante que es el que genera resentimiento y sólo nos hace pasar malos momentos. Caer en este cuadrante es sinónimo de infelicidad, ya que constantemente estamos viendo como no “deberían” suceder las cosas. Se aprecia con facilidad a las personas que están en este cuadrante porque siempre conjugan los verbos en condicional.
Aceptación – Con Posibilidad de cambios:
Este cuadrante es aquel donde elegimos no ser parte de la solución. Sabemos que hay una situación que no nos agrada, pero a su vez optamos por no hacernos cargo de ella. Si bien en este cuadrante la emoción reinante es la resignación existe una sensación de tranquilidad porque hubo una elección que posición tomar. La resignación no es una emoción negativa se acerca a un estado de paz.
Aceptación – Sin Posibilidad de cambios:
Este cuadrante es aquel donde vivimos algo que no nos gusta, pero no podemos cambiar las cosas. Cuando ocurre algo malo y no podemos volver atrás en vez de vivir no aceptando la situación sin poder hacer nada para cambiar lo ocurrido aceptamos y se logra la paz y tranquilidad. Los duelos bien llevados terminan en este cuadrante, porque la muerte de un ser querido es algo que claramente no podemos cambiar.
Independiente de lo que nos ocurra siempre tenemos la posibilidad de elegir un cuadrante en donde las emociones reinantes son más positivas. Entenderlo, identificar bien el cuadrante y conseguir la energía máxima para poder vivirlo es el gran secreto de la felicidad.
Esto hace bastante sentido a la oración de San Agustín que me repito día a día:
Fuerza para cambiar lo que se puede cambiar, serenidad para aceptar lo que no se puede cambiar y sabiduría para entender cuál es cuál.